CUSTODIA COMPARTIDA‎ ‎‎ ‎‎ ‎‎ ‎

Custodia Compartida

 

Proksch-Custodia-Compartida

Primer estudio representativo sobre padres divorciados y sus hijos en Alemania
.

 

Por Prof. Dr. Roland Proksch , Nuremberg , 30/05/2003

Nuevo derecho de los hijos es eficaz:
La custodia parental compartida integra a hijos y padres, asegura el pago de alimentos, proporciona a las madres más posibilidades de ejercer una profesión. La custodia monoparental excluye a la parte “eliminada” y pone en peligro el derecho de los hijos a mantener contacto con ambos padres. Hechos y números alarmantes. Juzgados de familia y oficinas de protección a menores exigidos. Legisladores solicitados.

Separación y divorcio constituyen un acontecimiento muy drástico de la vida tanto para padres como para hijos. Y cuando después de un divorcio no se da con regulaciones satisfactorias, en especial en cuanto al derecho de acceso y al de recibir alimentos, un serio conflicto viene preprogramado. Esto abruma tanto a padres como a hijos. A menudo durante toda la vida.

El nuevo derecho de los hijos vigente desde 1998 actúa desagravando conflictos. Ofrece claros alivios para padres y sus hijos. La suposición expresada, en efecto, hasta ahora solamente por especialistas de que la custodia parental compartida ayuda al bienestar de los padres y especialmente al de sus hijos, por primera vez pudo ser comprobada científicamente. Después de cuatro años de trabajo de investigación intenso tenemos finalmente los resultados del primer estudio más extenso y representativo fundado científicamente sobre la situación de padres divorciados en Alemania.

 

Muchos temas son muy urgentes para los padres divorciados

 

A pedido del Ministerio Nacional de Justicia el Profesor de Derecho de Nürnberg, Roland Proksch encuestó a todos los Jueces de Familia de Juzgados Municipales y Territoriales en Alemania, a todas las oficinas de protección a menores, como también a abogados que son miembros del grupo de trabajo sobre derecho de familia y sucesorio. Igualmente se les preguntó a más de 7.600 padres divorciados cómo habían arreglado, por ejemplo, la custodia de los hijos, cómo se aplicaba el derecho de acceso o también si estaban satisfechos con los pagos por alimentos y muchas otras cosas.

Proksch reconoció que: “Estaba muy sorprendido debido a la enorme resonancia, al final los padres elaboraron voluntariamente dos veces un cuestionario amplio de 24 páginas.”

Conversaciones detalladas personales con padres divorciados y 131 hijos de padres divorciados de todas las edades redondearon el estudio relacionado con la práctica.

 

Que el tema de la separación y divorcio era un tema urgente para muchos afectados, lo sintió el científico en carne propia, tanto durante las conversaciones personales como en las llamadas telefónicas. “Recibimos más de 1.500 llamadas por las dos hotlines instaladas extra.” Originariamente habían sido pensadas para responder solamente preguntas relacionadas con la encuesta. En el transcurso del periodo de investigación no pocos afectados llamaron y describieron enfáticamente su situación. “Casi todos los padres divorciados prescindieron incluso del anonimato y proporcionaron sus números de teléfono y de móviles. Muchos padres casi no lo podían creer: “¡Finalmente alguien que pregunta por nosotros, que se interesa por nuestra situación!”

 

 

Justo en caso de conflictos entre padres: custodia compartida claramente mejor – para el bienestar de los hijos

 

Los resultados del estudio son significativos. Así el investigador pudo comprobar que no existe un conflicto entre madres y padres, sino conflictos entre padres con los cuales los hijos viven y con los cuales los hijos no viven. Llama extraordinariamente la atención: existen graves conflictos especialmente en casos de divorcio en los cuales una parte de los padres recibió el derecho de custodia monoparental y la otra parte no. Proksch está convencido de que la “eliminación” de una de las partes al traspasar la custodia monoparental para la otra parte favorece en gran medida las tensiones: “Ya que cuando se recibe la custodia parental compartida no existe ningún “perdedor”.

 

El hecho de recibir la custodia parental compartida tiene un alto valor simbólico y psicológico especialmente para la parte “antes eliminada normalmente”. Es decir que la otra parte se inmiscuye en la educación. Sin embargo, esto favorece también por falta de alternativa mejor un comportamiento de diálogo satisfactorio entre ambos padres. “De esta forma los padres son exigidos,”estableció Proksch y “esto es igualmente notable: ¡en tal cosa se embarcan regularmente los padres con custodia compartida! Y sea como sea éstos constituyen tres cuartos de todos los padres divorciados.”

El científico puede probar que estos efectos se deben a la custodia compartida. No solamente los padres “pacíficos” tienen la custodia parental compartida. Alrededor de un tercio de los padres encuestados con custodia compartida comenzaron su proceso de divorcio con un pedido de custodia monoparental, 14 % luchó por la misma hasta la decisión judicial negativa. También para esos padres que entonces debían recibir la custodia compartida “contra su voluntad”, posteriormente se constataron efectos positivos.

 

La custodia parental compartida llama a padre y madre aún después del divorcio a ser responsables y esto resulta en el bienestar de los hijos. La misma reduce de esa forma discusiones indecibles, a menudo muy emocionales y procesos judiciales caros. La custodia compartida favorece la cooperación de los padres en cuestiones de una regulación parental de común acuerdo post-matrimonial y un trato adecuado al bienestar de un hijo.

 

Resultados claros: la custodia parental compartida favorece el derecho del hijo al acceso y su derecho a recibir alimentos

El investigador de Nürnberg llegó a resultados sorprendentemente claros en cuanto a pagos de alimentos. “Cada juez sabe por experiencia propia cuando se trata de pagos de alimentos atrasados. Pudimos comprobar que justo la custodia compartida conlleva a pagos de alimentos seguros.” Y lo probamos con hechos: la custodia parental compartida conlleva a casi 100 por ciento de pago de alimentos, ya que 93,5 por ciento de los padres obligados a pagar alimentos con custodia compartida declaran que pagan los alimentos para sus hijos; lo que por otra parte es confirmado por casi 87 por ciento de las madres con derecho a recibir pago de alimentos. “Esta concordancia sumamente alta de los datos fue impresionante para nosotros”, destaca Proksch. Este resultado también es soportado por un estudio del Ministerio Nacional de Familia: existe una relación clara entre la custodia compartida y los pagos de alimentos regulares.

 

Muy sorprendente: visto por porcentaje viven tres veces más hijos de padres con custodia compartida con sus padres(¡) que hijos de padres que poseen el derecho de custodia monoparental. Estos hijos visitan regularmente a sus madres. Parece que exactamente estos padres consideran más las necesidades de sus hijos, prescinden de fechas de visitas fijas y que han encontrado soluciones flexibles, individuales y adecuadas a los niños en cuanto al trato y visitas.

 

Custodia monoparental – “Eliminación de una parte de los padres, boicot de acceso en muchos casos, peor moral de pago, aumento de indecibles procesos judiciales

 

Por el contrario la custodia monoparental crea “perdedores”. Excluye a la parte “eliminada”. Esto significa lógicamente, disgusto, heridas profundas y fastidios innecesarios. En muchos casos la parte con la custodia monoparental está en contra del derecho al acceso de la otra parte. A menudo los derechos legítimos de acceso son torpedeados de manera efectiva por la parte con la custodia monoparental. Cuanto más tiempo duran tales actividades, menor será la posibilidad de poner en práctica el derecho al acceso. Las partes afectadas podrían “con toda tranquilidad dejar actuar al tiempo por sí solo”.

 

Explosivo en esto: Los padres con custodia monoparental admiten que ellos mismos ya no desean tener contacto con la otra parte. “Las necesidades de los hijos, que como ya es sabido ambos padres aman, serían ignoradas en ese caso. Los Juzgados parecen impotentes. Estas partes apenas debían temer sanciones judiciales, tales como ejecución forzosa o mediación. Estas medidas son naturalmente “opciones teóricas”, en efecto en la práctica raramente pueden ser realizadas. ¡Lo que internacionalmente en casos individuales ha llevado a complicaciones diplomáticas, es rutina en Alemania! Además el largo periodo de duración del proceso de acceso viene muy bien para las intenciones de la parte que boicotea el acceso a la otra parte. Aquí es requerido el legislador.

 

“El derecho de custodia monoparental aumenta de esa forma la cantidad indecible de procesos judiciales,” declara Proksch, “ y dificulta en gran medida una comunicación y cooperación satisfactoria entre los padres. Un derecho de acceso para el bienestar de los hijos se hace difícil y los deseados pagos de alimentos seguros constituyen aquí infelizmente la excepción.” Esto prueban a su vez los hechos: un 88 por ciento de los padres obligados a pago de alimentos declararon en efecto que pagaban los alimentos de los hijos, sin embargo solamente 67 por ciento de las madres con derecho a recibir alimentos pudieron corroborar esto.

 

Cifras alarmantes – alto número de rupturas de contacto en caso de custodia monoparental

 

Y Proksch nombra otras cifras alarmantes: “Más de 40 por ciento de las madres y los padres con derecho a visita sin custodia parental o tienen contacto raramente o ningún tipo de contacto con sus hijos. La custodia monoparental conlleva en gran medida a una exclusión de la parte que tiene derecho de acceso a sus hijos. Especialmente malo es que en alrededor de un cuarto de los padres con custodia monoparental la otra parte ha cortado completamente el contacto con los hijos ya después de la separación o del divorcio. Hechos que actúan en contra del derecho de los hijos. Esto aparentemente tampoco puede ser impedido por la consulta de los hijos, lo que es obligación en cuestiones de divorcio. El científico llama la atención encarecidamente a un resultado especial del estudio: “¡Las rupturas de contacto aumentan regularmente año tras año casi un 10 por ciento!”

 

 

 

Compatibilidad de profesión y familia tras el divorcio

 

Proksch investigó entre otras cosas también las experiencias de los padres con las Oficinas de Protección a menores y curadores procesales (abogados de los niños), se interesó por perfeccionamientos de jueces, se informó sobre los contactos de los hijos afectados con los abuelos y formuló la pregunta: ¿Cómo funciona con la compatibilidad de profesión y familia después del divorcio? ¡También esto es un informe sobre responsabilidad parental compartida!

 

“Averiguamos que las madres con custodia compartida ejercen más frecuentemente una profesión que las madres con custodia monoparental. Por esta razón disponen naturalmente de ingresos más altos.” El resultado lógico entonces también en blanco y negro: las madres con custodia compartida estiman su situación de vida de forma más positiva que las madres con custodia monoparental. Por cierto, la situación financiera de muchos padres divorciados con hijos menores de edad, independientemente de la forma de custodia, es extremamente difícil y preocupante. “La falta de posibilidades para el cuidado de los niños, la difícil situación del mercado laboral y las expectativas del mundo laboral para con los padres dificultan la toma de ocupaciones tanto para madres como para padres.”

 

Resultados de entrevistas personales con 131 hijos de padres divorciados afectados

 

El científico también llevó a cabo conversaciones personales con padres e hijos. Aunque las conversaciones personales de los hijos de padres divorciados pudieron iluminar solamente una pequeña parte de la realidad de la vida tras el divorcio de sus padres, igualmente confirmaron los resultados del estudio. Los hijos se aliviaban cuando podían sentir de parte de ambos padres que el contacto entre ambos era incentivado y expresamente querido por ambos. La pelea de los padres recargaba a los hijos porque a menudo no podían reconocer cuál es o era en realidad la causa de la pelea. Aún peor era para los hijos cuando también eran incluidos en la misma o cuando incluso debían tomar partido por uno de los padres. Con frecuencia sobre todo los adolescentes sentían que esta cuestión era un “juego de poder de los padres y se encontraban entonces ante conflictos de lealtad. Se sentían completamente mal cuando debido a eso se mezclaban problemas financieros de los padres. Y los hermanos formaban a menudo una “fracción propia” – totalmente también contra ambos padres.

 

Exigencia al legislador: imponer derecho de los hijos a la convivencia y trato con ambos padres

 

¿Conclusión del estudio? “Solamente me resta apelar a todos los jueces de familia para que solamente en casos de necesidad recurran a la custodia monoparental de madres y padres.” En la práctica actual la custodia monoparental ha sido transferida a una de las partes cuando la comunicación entre los padres ya no es posible. “Ya que los padres sin embargo no obstante eso deben ponerse de acuerdo en cuanto a las reglas de acceso y de esa forma también deben comunicarse, este argumento ya no es entonces contundente.” Proksch le recomienda al legislador el subsidio de oficinas de asesoría pre-judiciales y otras ofertas, tales como mediación (posibilidad extra-judicial de regular conflictos), que también deberían ser privilegiadas por derecho judicial . “Sencillamente no puede ser que el subsidio estatal se limite a la ayuda de costes procesales. Las posibilidades extra-judiciales para regular conflictos deberían ser respaldadas por lo menos de forma similar – ¡Esto es para el bienestar de los hijos!”

 

Además debería ser pensado sobre todo cómo puede ser puesto en práctica realmente el derecho de los hijos a la convivencia y trato con ambos padres. Aún parece seguir estando en primer lugar el interés de los padres, de disputarse mutuamente por los hijos. Eso debe ser remediado. Aquí es requerido el legislador.

 

Referencia: Proksch, Roland: Begleitforschung zur Umsetzung der Neuregelung des Kindschaftsrechts (Kindschaftsrechtsreformgesetzes vom 01. Juli 1998).
Studie im Auftrag des Bundesministeriums der Justiz (2002).
Bundesanzeiger Verlag, Köln.
ISBN: 428 / 3-89817-248-1

                                                      

Back